Orlok,
al comerse a sí mismo entró en un vórtice de confusión y entendimiento. En ese viaje introspectivo conoció a los Wayúu, quienes lo metieron en
el sueño de un viajero.
Allí Orlok sembró la semilla del jardín. Y el jardín creció.
Al despertarse el viajero,
Orlok vivió su experiencia de auto entierro.
(*) El boceto fue realizado por el Hermano Renfield viajando en tren desde Cracovia a Kiev. Allí describe, en unos simples trazos, la concatenación de sinusoides y las ventanas espacio-temporales que ellas engendran.
No hay comentarios:
Publicar un comentario