Efemérides​: 6 de Čičidlji – Jornada de Panteísmo y Panceta

Fig. 1

Antes de la llegada del orlokianismo y del islam a los fríos valles balcánicos occidentales, en el sexto día del mes de Čičidlji, la aristocracia realizaba la tradicional matanza del cerdo pancetero; animal especialmente apreciado por su intenso poder pancetífico. Vale aclarar que en aquella época, a raíz de la promulgación de las denominadas “Reglas Áureas de la Correspondencia Conceptual”, dictadas por el sudoroso Conde de Bajonia, el consumo de panceta era un símbolo de status; ya que los terratenientes poseían vastos bosques de bellota donde generalmente proliferaban cerdos. En tal sentido, y con el correr de los años, se institucionalizó la identificación de los gordos con el poder.

Como era de esperarse, el orlokianismo se cagó en esta tradición y subvirtió dicho principio áureo, distribuyendo papa* entre la población y fomentando su consumo. De esta manera, la prole engordó a fuerza de papa y en poco tiempo, comenzaron a ostentar títulos lípidos; disputándole así el poder a los gordos panceteros. En paralelo, la prole orlokiana inició una ola de secuestros extorsivos de cerdos, los cuales eran devueltos a sus amos contra el pago de un elevado monto de transacción. La sorpresa y el pavor paralizaron a la federación pancetera, al encontrar que sus cerdos eran devueltos vivos aunque mutilados, ya que, justamente, se les extirpaba la panceta para producir velas y para extirparle simbólicamente el poder a la federación pancetera.

Generalmente se asocia la prohibición del consumo de cerdo con el islam, pero en concreto, fue el orlokianismo quien promovió su abstinencia, ya que era estrictamente necesario producir velas, a fin de que la palabra del Maestro pudiera ser leída de noche y, a su vez, para iluminar eficientemente el terreno durante la ejecución de los secuestros porcinos. De esta forma, la economía de la prole orlokiana fue floreciendo sostenidamente, hasta que a los gordos panceteros oligarcas no les quedó más remedio que irse a la mierda.

A partir de allí, el sexto día del mes de Čičidlji pasó a ser una festividad del pueblo orlokiano; donde, en consonancia con el colorido balcánico, se rememora por igual a dioses orlokianos y no orlokianos y se le rinde tributo a la panceta redentora, asándola empalada (Fig.1).

(*) Se estima que esta gesta tuvo también como resultado la introducción de la papa en los balcanes.